– Publicidad CPC (Coste Por Click) o PPC (Pay Per Click): Este modelo publicitario permite establecer un precio por cada click recibido en el anuncio y suele ser muy utilizado en plataformas de publicidad contextual, de forma que se incrementa la probabilidad de pinchar en el anuncio cuando el usuario está realmente interesado. Los precios suelen oscilar, dependiendo de la competencia de cada temática, entre los pocos céntimos por click hasta los varios euros por click. La publicidad PPC o CPC suele ser muy segmentada y obtiene un gran retorno de la inversión (ROI).
Por ejemplo; Con un presupuesto de 50€ de inversión, suponiendo que es una temática poco competida con un precio de 0,05€ por click, supondría 1.000 posibles clientes que llegan hasta tu servicio o producto. Son 1.000 posibles ventas.
La mayoría de los buscadores como utilizados en el mundo como Google, Bing o Yandex ofrecen la posibilidad de contratar publicidad CPC. Como nota adicional, existen mecanismos para evitar el uso fraudulento de la publicidad CPC, de forma que los clicks masivos o automatizados son detectados y anulados
– Publicidad CPM (Coste Por Mil): Este modelo publicitario establece un precio por cada mil impresiones, de forma que por cada mil veces que se muestre el anuncio se paga una cifra. La publicidad CPM se suele utilizar para realizar campañas masivas de banners gráficos. Mil impresiones no tiene por que significar mil usuarios que vean el anuncio, ya que un mismo usuario podría estar navegando por diferentes secciones de un sitio web y mostrarse el anuncio en cada sección del sitio web incluso sin que el usuario se llegue a fijar en dicho anuncio.
Por ejemplo; Con un presupuesto de 50€ de inversión, suponiendo un precio de 0,50€ por cada mil impresiones, se obtendría un total de 100.000 impresiones. Aunque puede parecer un número bastante significante, si los anuncios no se distribuyen en franjas horarias/fechas, las 100.000 impresiones en Internet se podrían consumir en cuestión de pocos minutos.
– Publicidad CPL (Coste Por Lead): Este modelo de publicidad se basa en pagar por adquisiciones o acciones realizadas. El precio depende totalmente de la acción, producto o servicio. La acción podría ser rellenar un simple formulario de registro o subscripción a un newsletter.
Existen muchos más modelos de tarificación publicitaria, cada uno con sus pros y contras, así que es muy recomendable contar con la experiencia de una agencia de publicidad que determine y ejecute de forma optima los anuncios más adecuados para cada caso.